viernes, 27 de enero de 2012

Esqui de travesía en Italia y Suiza: Powder Alert!!



Angel machacando el polvo con sus nuevos skis

Powder´s Raiders:
Angel Luengo
Eduardo Rucandio


Zonas:
Courmayeur-Aosta
Costa di Serena (2.937 m) - Paso del Gran San Bernardo
Shwarzhorn (2.928 m) - Grindelwald
Grindelwald

Si aplicamos la formula de 1 día festivo en Reinosa+1 fin de semana+3 días de vacaciones+1 llamada a Ángel, tenemos de resultado una escapada a los Alpes para esquiar. Un par de días para preparar el viaje: comprar billetes de avión, alquilar coche, buscar morada...y el Viernes salimos de Bilbao con rumbo a Ginebra.

Nos ponemos rumbo al Valle de Aosta, ya que al sur de los Alpes el tiempo será algo mas estable en nuestros primeros días. Y así fue...ya que de camino a Chamonix la nevada era copiosa (que ganas de volver a ver nevar) y sin embargo al otro lado del tunel del Mont Blanc, apenas nevaba.

Para el primer día de actividad, decidimos sacar el pase de la estación de Courmayeur...ha estado nevando, y no sabemos como esta el nivel de avalanchas, aunque suponemos que el tema estará delicadillo...pues acaba de caer medio metro de nieve. Y disfrutamos de lo lindo en la estación, aunque a penas pisamos las pistas...eso sí, no paramos de hacer buenas bajadas sobre esa nieve recién caída...crema pura...que suavidad. Hacemos descensos entre los pinos del bosque, por canales, por palas...¡¡Con este día ya hemos amortizado gran parte de nuestro viaje!!

Pero no nos conformamos con esto y queremos más. De hecho para el segundo día ya tenemos el parte de avalanchas, un libro con mucha tarea por hacer y muchas ganas de repetir otro día de buenas bajadas.

Nos acercamos a la zona del Paso del Gran San Bernardo, paso fronterizo entre Suiza e Italia. Aqui hemos elegido una ruta de esquí de montaña, que parece ser una de las clásicas de la zona. Es el Pico Costa di Serena con una altura de 2937 m. La verdad que hay mucha gente con los skis, pero todos se quedan en el Coll di Serena. Desde aquí subimos por unas palas más fuertes hasta llegar a una arista, donde con los esquis a la mochila, la recorremos de un extremo a otro.


Subiendo al Costa di Serena


Ya en la cumbre, y tras comer algo, nos ponemos los esquis y empieza el disfrute.... ¡¡Vaya bajadón!! Nieve polvo super suelta, por una pala que estaba aún sin pisar. Vaya días que estamos teniendo.

Aosta esta muy bien para el esqui de montaña, y en el libro que hemos comprado vienen unos recorridos muy buenos y recomendables, pero tenemos ganas de ir a conocer Suiza, así que cogemos nuestro Fiat Panda de alquiler, y pasando la frontera por el tunel del Gran San Bernardo, ponemos rumbo a las montañas del Oberland.

Hacemos nuestro campo base en Interlaken, bonito pueblo situado en un impresionante valle glaciar, entre dos espectaculares lagos. Hemos llegado por la noche y otra vez no tenemos nada de información de la zona. Hoy el día esta un poco más gris y amenaza nieve, por lo que decidimos subir algún pico próximo al entorno de la estacíón de esquí de Grindelwald. Subimos al Schwarzhorn (2.928 m). El sitio es una pasada, pues estamos rodeados de grandes y míticas montañas; y entre ellas una que destaca por encima del resto por su famosa pared norte, El Eiger. Aqui se han escrito grandes gestas, aunque tambien tragedias, del alpinismo moderno. La bajada es muy larga y continua, 1600 m de desnivel, pero la nieve no es tan espectacular como en los días anteriores. Sin embargo las vistas nos recompensan, aunque a ratos entra la niebla y se cubre todo.

Bajada del Schwarzhorn, con el Eiger de fondo

Nos ha costado encontrarle, pero ya tenemos libro de la zona, y tambien mucha tarea que hacer...pero ya la meteo no nos acompaña...de hecho ha amanecido nevando en Interlaken (500 m). Así que volvemos a la estación de ski de Grindelwald, para darnos otra foqueada por la zona. Nieva, y a ratos nieva mucho...da gusto ver nevar así...De hecho en poco tiempo cayerón 15 cm.


Aunque estamos foqueando por las pistas, tampoco nos preocupa mucho, pues la estación esta bastante vacía, y vamos a los píes del Eiger a través de un bosque de pinos, mientras nieva a todo nevar. Al menos nos hicimos otra bajada larga sobre nieve polvo recién caída.


Caras de felicidad tras una buena bajada


Ya nos tenemos que ir, por la tarde sale nuestro avión de vuelta a nuestra rutina diaria. Hemos hecho 4 días de ski, algunos de ellos tardarán en olvidarse. El viaje ha sido un exito, sobre todo teniendo en cuenta el tiempo que hemos usado para planificarle: sobre la marcha.


Y de camino, pues nos queda algo de tiempo para hacer algo de turismo, así que visitamos Thun y Ginebra. Merece la pena ver los paisajes y ciudades de este pintoreco país. Nos vamos, aunque volveremos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que putos amos...vaya powder.